Comunicado: 26 de enero, Día de la Educación Ambiental – Reflexión

Comunicado: 26 de enero, Día de la Educación Ambiental – Reflexión

En este día dedicado a la Educación Ambiental, nos vemos impulsados a reflexionar sobre la realidad que enfrentamos. No celebramos simplemente la Educación Ambiental, sino que, de manera más profunda, reflexionamos sobre la falta de CONCIENCIA AMBIENTAL que actualmente prevalece. Nuestra cultura y desarrollo están intrínsecamente ligados a la adaptación al entorno en el que vivimos y trabajamos.

Colombia se ha caracterizado por los procesos industriales, comerciales y económicos que, en los últimos 50 años, han ocasionado un notable deterioro del medio ambiente. Esta realidad se traduce en la modificación de suelos, la reducción de la capacidad del agua, procesos de Eutrofización en ríos, disminución de poblaciones de peces, contaminación del agua con mercurio y fósforo, destrucción de bosques tropicales y una alta contaminación con agroquímicos agrícolas afectando tanto el agua como los suelos.

Hoy, concluimos que la Educación Ambiental es sinónimo de CONCIENCIA y CONOCIMIENTO, donde la interacción comunitaria se vuelve crucial para el desarrollo económico mediante planes de ejecución y proyectos.

La falta de Educación Ambiental en las empresas no se atribuye a la ausencia de leyes o programas promotores, sino a la dificultad real de articular el conocimiento necesario para realizar diagnósticos precisos. La realidad empresarial en Colombia refleja un distanciamiento creciente del conocimiento científico de las realidades cotidianas.

La ineficacia de la información ambiental en los medios de comunicación, la escasa adopción de procesos sustentables y la falta de concienciación y Educación Ambiental contribuyen a este problema.

Los bajos niveles educativos propician el consumo excesivo de recursos naturales como agua y energía, sin adoptar tecnologías de producción limpia y circular. Esto se evidencia en el uso de plaguicidas y fertilizantes que afectan la fauna y flora, así como la contaminación del agua con sustancias no biodegradables, generando graves consecuencias para la salud humana.

Es crucial que comunidades, empresas e instituciones actúen conforme a los Objetivos de Desarrollo Sostenible y en el marco de la RESPONSABILIDAD SOCIAL. Transformar nuestros modelos organizacionales, establecer políticas y planes corporativos, y adoptar prácticas que promuevan la sostenibilidad son pasos esenciales.

La lógica de la Responsabilidad de Sostenibilidad Ambiental en las empresas aporta a la Educación y protección del Medio Ambiente, ofreciendo ventajas significativas:
· Incorporación de objetivos sostenibles.
· Cuidado de los recursos naturales: agua, suelo y aire.
· Manejo adecuado y responsable de agentes químicos.
· Implementación de prácticas que potencien la sostenibilidad.
· Transmisión de una imagen comprometida con el aprovechamiento responsable de recursos.
· Creación de un clima laboral saludable.
· Contribución al bienestar del medio ambiente.

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