LA CRISIS DEL AGUA EN BOGOTA

Las causas de desabastecimiento de agua en la ciudad de Bogotá se esta evidenciado desde hace 25 años, por los factores de déficit de los niveles de precipitaciones en el país, por el aumento del recurso a causa del cambio climático por el exceso de calor, por la deforestación de la amazonia.
Siendo el embalse de Chuza el que abastece el 70% de la población de Bogotá y municipios cercanos, la capacidad del embalse ha disminuido por los factores climáticos y la deforestación.
Hoy es importante que los colombianos nos sensibilicemos y cambiemos los hábitos de consumo de agua para contribuir con el ahorro del líquido, y de acuerdo a los pronósticos del clima, cada vez disminuirán las lluvias a causa del Cambio Climático.
Actualmente Bogotá pasa por un proceso de racionamiento de agua el cual se había previsto en estudios relacionados a la gobernanza del agua del Sistema Chingaza el cual fue creado a mediados del siglo XX, por la ausencia de agua confiable y suficiente para los habitantes de la ciudad, la construcción de los sistemas fue diseñados como respuesta
a las necesidades de la expansión urbana y del déficit de agua de la época.
De acuerdo al Ministerio del Medio Ambiente si se llega a diciembre con un embalse de capacidad del 22% de reserva de agua, dicen que no habrá capacidad de las reservas para poder pasar la temporada seca hasta la temporada de lluvias en el mes de abril del próximo año 2.025.
De acuerdo a este informe del Ministerio se requiere un control de demanda de 3 metros cúbicos por segundo al día a partir del mes de octubre del 2.024.
En la actualidad el embalse se encuentra en el 44%, si se mantiene los consumos actuales al mes de diciembre se tendrá una capacidad del 22% y no habrá el suficiente tiempo para recuperar su capacidad y atender la demanda.
La triste realidad es que Colombia es rica en agua, pero muy escaza en inversiones lo cual se refleja en el exceso, escasez y contaminación.
Siendo la contaminación es el más grave problema ya que está acelerando los desplazamientos humanos.
La Economía Política en Colombia ha dejado desamparado el desarrollo del sector hidráulico en los aspectos de los saneamientos, para la recuperación del agua contaminada por bacterias, virus, parásitos, fertilizantes, pesticidas, fármacos, nitratos, fosfatos, plásticos, desechos de las ciudades, permitiendo afectar la salud pública, el ambiente y el bienestar económico, en la actualidad los tratamientos de las aguas residuales en Colombia solo alcanzan el 20.30%, esta cifra habla muy claro de las pocas inversiones para retornar el agua a su estado natural.
El tratamiento del agua es cada vez mas necesario debido a la escasez de agua potable y a la creciente necesidad de la población, hay que tener en cuenta que el total del agua que hay en el planeta, solo el 2.5% es agua dulce y de esa cantidad tan solo el 0.4% es agua apta para el consumo humano.
Las inversiones deben estar orientadas al acueducto, alcantarillado y saneamiento básico, para recuperar el 80 % del agua residual del mundo para transformarla en agua limpia, por lo tanto, debemos ver el agua residual no como un residuo sino más bien como un recurso.
A medida que las ciudades sigan creciendo, el futuro de ellas y desarrollo de ellas se deben de centrar e la recuperación de acuerdo a los principios de la Economía Circular.
Hoy a los políticos les da un miedo atroz a dar información sobre la carencia del agua, ya que los gobiernos han dejado sus decisiones al Ministerio del Medio Ambiente, por la poca financiación y por la capacidad de gobernanza de los funcionarios y en la decisiones que tomaran a las afectaciones ambientales, la realidad es que este Ministerio esta la realidad de los Ecosistemas del mundo.